Una década de ingeniería que salva vidas: la historia de ANRACI.

Apreciados Asociados de Anraci!

Todo comenzó con una chispa. No una chispa cualquiera.

Una chispa invisible, encendida en los rincones de la indiferencia, en los pasillos de la burocracia, en los silencios de quienes pensaban que la prevención era un lujo, no una necesidad.

Pero tú la viste. tú la sentiste. Y decidiste actuar.

Hace diez años, ANRACI no era más que una idea. Una visión compartida por unos pocos que sabían que el verdadero enemigo no era el fuego, sino la costumbre de ignorarlo.

Hoy, esa visión es una realidad. Y no lo es por magia, ni por suerte. Lo es gracias a ti.

Tú, que aportaste tu tiempo, tu conocimiento, tus recursos.
Tú, que creíste cuando otros dudaban.
Tú, que entendiste que proteger vidas no es solo instalar sistemas, sino construir país.

En esta historia no hay superhéroes con capas. Hay profesionales con planos, técnicos con herramientas, líderes con convicción. Y todos tienen algo en común: un profundo sentido de la responsabilidad. Una disciplina férrea. Y un compromiso que arde más fuerte que cualquier incendio.

Gracias a ti, ANRACI ha resistido. Ha crecido. Ha salvado vidas en este camino compartido. Y lo seguirá haciendo.

Porque esta historia no termina aquí. El fuego sigue al acecho. En cada rincón mal diseñado. En cada norma ignorada. En cada decisión postergada. Pero mientras tú estés ahí —vigilante, comprometido, incansable— la llama de la prevención seguirá encendida.

Tú eres el héroe de esta historia.

Y lo mejor… aún está por escribirse.

Con admiración y profunda gratitud,

P.D. Quiero invitarte a leer una breve semblanza que hemos construido con motivo de la conmemoración de la primera década de gestión de Anraci: 10 años de gestión ininterrumpida, Anraci, liderando el crecimiento y consolidación de la protección contra incendios.